La Universidad de Antofagasta informa que ya se ha hecho efectivo el encasillamiento académico de su planta regular, un hito relevante que otorga estabilidad laboral y consolida la carrera académica de un grupo de docentes que hasta el 31 de diciembre de 2023 se encontraban en calidad de contrata.
Este procedimiento, impulsado por la rectoría y llevado a cabo por la Contraloría Interna y la Secretaría General, permite a los académicos que cumplen con los requisitos establecidos, pasar de la condición de “contrata” a la de “propiedad”. El proceso fue validado previamente por los anteriores órganos colegiados de la universidad (el Consejo Académico y la Junta Directiva), y el Decreto respectivo ya cuenta con toma de razón de la Contraloría General de la República, lo que lo convierte en una realidad institucional.
Los criterios rigurosamente aplicados consideran principalmente la antigüedad y la evaluación académica, garantizando que este avance reconozca el compromiso y desempeño de excelencia de los académicos de jornada completa y media jornada.
Al respecto, el rector de la Universidad de Antofagasta, Dr. Marcos Cikutovic Salas, señaló: “Este proceso constituye un avance fundamental para nuestra institución, ya que otorga estabilidad a quienes han dedicado su trayectoria a la docencia, vinculación e investigación en la Universidad de Antofagasta. El encasillamiento académico es también una señal clara de nuestro compromiso por valorar el trabajo de excelencia de nuestros académicos y fortalecer así la misión educativa, investigativa y de vinculación con el medio que nos caracteriza como universidad estatal, regional y laica”.
Este encasillamiento entrega mayor seguridad laboral a los académicos beneficiados, y al mismo tiempo fortalece la capacidad institucional para continuar formando profesionales de calidad y desarrollando investigaciones de impacto regional y nacional, reafirmando el rol de la Universidad de Antofagasta como motor de conocimiento e innovación al servicio de la sociedad.
Fernando Fernández de la Cerda, Secretario General de la UA, agregó: “Este proceso inédito en nuestra institución fue trabajado durante años por la Contraloría Interna y la Secretaría General, con el objetivo de saldar una deuda histórica con los académicos que llevaban décadas en condición de contrata. Se elaboró una propuesta con requisitos claros, revisada y aprobada por los cuerpos colegiados, que permitió dar estabilidad a quienes cumplen un rol fundamental en la docencia e investigación de la universidad”.
A su vez, el Contralor interno de la Institución, Marcelo Diaz Sanhueza destacó: “Al ser un proceso inédito en nuestra institución, fue necesario sostener reuniones con la Contraloría Regional y consensuar ciertos procedimientos, además de complementar información requerida. Finalmente, tras cumplir con los requisitos de antigüedad y calificación establecidos por los órganos colegiados, la Contraloría tomó razón del decreto, lo que permitió concluir exitosamente el proceso y otorgar la calidad de propiedad a un número importante de académicos”.
Por su parte, la Vicerrectora Académica, Dra. Catherine Jara Reyes apuntó: “Este encasillamiento no solo resuelve una situación administrativa, sino que también es un acto de reciprocidad hacia quienes han entregado su vida profesional a nuestra universidad. Significa reconocer el compromiso y la entrega de nuestros académicos, otorgándoles la estabilidad laboral que durante años esperaron y que hoy se concreta como un justo reconocimiento a su labor”.